Ideas para
mejorar la enseñanza de matemáticas
1. Para
alcanzar objetivos actuales necesitamos procedimientos actuales
“Para cumplir
los objetivos que debe alcanzar cualquier sistema educativo no podemos mantener
los mismos procedimientos”, asegura Fernández Bravo.
La buena
noticia es que ya contamos con nuevas metodologías, lo malo es que no las
estamos aplicando.
2. No
hay que cambiar a una cultura del esfuerzo, hay que cambiar a una cultura de
escuchar
Es muy habitual
escuchar que nuestro sistema educativo ha fracasado por una falta de esfuerzo y
disciplina entre nuestros alumnos. Para Fernández Bravo esto no es más que una
manera de tirar balones fuera: “Como nosotros no hemos sabido dar
respuesta a esas necesidades, tenemos que explicar nuestro fracaso de
alguna manera. Una manera que tenemos de explicarlo es que hemos fallado en lo
que hemos propuesto y otra que han fallado los demás”.
Un sistema
educativo debe permitir al que enseña hablar a sus alumnos para poder
escucharles, no para que te escuchen
“Usted
esfuércese”, insisten las autoridades educativas. “¿En qué?”, se pregunta el
decano. “¿En seguir sin comprender una y otra cosa? Yo no me puedo esforzar en
comprender una división si no sé qué es multiplicar. Por mucho que me esfuerce,
por muy disciplinado que sea y por muchas operaciones que haga, jamás lo
entenderé”.
En opinión de
Fernández Bravo, no hay que cambiar a una cultura del esfuerzo, hay que cambiar
a una cultura de escuchar al que aprende: “Un sistema educativo debe
permitir al que enseña hablar a sus alumnos para poder escucharles, no para que
te escuchen, y mientras ese paradigma no se imponga y no obliguemos a que se
respete, difícilmente vamos a encontrar respuesta”.
3. No
avanzaremos mientras no haya mejores resultados con menos esfuerzo
En opinión de
Fernández Bravo, una metodología es buena en la medida en que genere mejores
resultados con menos esfuerzo. “¿Qué está pasando hoy?”, se pregunta. “Que no
hay avance didáctico. ¿Por qué? Porque en vez de conseguir mejores
resultados con menor esfuerzo, se tienen peores resultados con un esfuerzo
impresionante del niño, haciendo cantidad de ejercicios, con un esfuerzo impresionante del profesor y además con
unas notas exteriores que no son buenas. ¿Cuál es la metodología innovadora?
4. Debemos
superar la resistencia al cambio
En opinión del
decano “el cambio a lo habitual cuesta mucho socialmente”, y las
autoridades no han entendido que contamos con nuevos métodos para enseñar más y
mejor. “¿Qué se está haciendo hoy en las escuelas?”, se pregunta Fernández
Bravo.
5. No podemos
confundir subir el nivel con adelantar contenidos
El profesor es
muy crítico con la nueva ley educativa. “Los que han hecho esta ley confunden subir el nivel
con adelantar contenidos”, asegura. “¿Qué va a pasar? Que si antes el
fracaso estaba en sexto ahora va a estar en tercero, el 90% de los niños
obviarán las matemáticas en tercero. ¿Por qué? El profesor será el mismo, los
contenidos habrán aumentado, y mientras en otros países están viendo poco pero
bien, para luego ir rápido y entender, aquí vemos mucho y mal para
anular cualquier posible acción y avance intelectual lo antes posible”.
6. La
tecnología debe ser un medio, nunca un fin
“Las nuevas
tecnologías mal utilizadas están evitando la manipulación de materiales, el
entendimiento y la comprensión”, asegura Fernández Bravo con
rotundidad. ¿Qué estamos haciendo con las nuevas tecnologías? Según el
decano, “sustituir el papel impreso del libro por la misma imagen no trabajada
del libro que se ve en la pizarra digital. Se puede enseñar mejor con
dos palos y tres piedras que con las modernidades más grandes, porque en
definitiva no hay avance mientras no haya mejores resultados con menos
esfuerzo”.
7. La solución
no está ahí fuera
“Estamos en un
momento en el que parece que la validez de una idea depende de la distancia que
recorra”, explica Fernández Bravo. “Si la idea viene de Wisconsin, buah, es
fabulosa. Si la idea viene de Móstoles no es tan fabulosa. Ya tenemos en España
muchas personas que pueden y tienen mucho que decir, lo que pasa es que no
nos interesa escucharlas. No hay que salir fuera para ver qué métodos hay”.